Año: A(II). Semana de los salmos: 1. Color litúrgico: Violeta.
San Nicolás
Fue obispo de Myra, en Licia (hoy parte de Turquía) y murió hacia mediados del siglo IV. Ha sido venerado en toda la Iglesia, especialmente desde el siglo X. Por su ayuda a los pobres, es el patrón de los prestamistas, cuya insignia de tres bolas de oro representa los tres monederos de oro que, según se dice, entregó en secreto a un pobre que no podía permitirse la dote de sus tres hijas. Véase el artículo en
Wikipedia.
Sobre el autor de la Segunda Lectura del Oficio de Lecturas de hoy:
Segunda Lectura: San Cipriano (210 - 258)
Cipriano nació en Cartago y dedicó la mayor parte de su vida al ejercicio de la abogacía. Se convirtió al cristianismo y fue nombrado obispo de Cartago en 249. Dirigió la iglesia en tiempos difíciles, incluida la persecución del emperador Decio, cuando se escondió para poder seguir cuidando de la iglesia. En 258 comenzó la persecución del emperador Valeriano. Cipriano fue primero exiliado y luego, el 14 de septiembre, ejecutado, tras un juicio notable por la calma y cortesía mostrada por ambas partes.
Las numerosas cartas y tratados de Cipriano arrojan mucha luz sobre un periodo formativo de la historia de la Iglesia, y son valiosos tanto por su doctrina como por la imagen que pintan de un grupo de personas en constante peligro de muerte, pero decididas a mantener la fe.
Color litúrgico: violeta
El violeta es un color oscuro, ‘el tinte sombrío de los mortificados, que denota aflicción y melancolía’. Litúrgicamente, es el color del Adviento y la Cuaresma, los tiempos de penitencia y preparación.
| Lectura de media mañana |
Isaías 4:2 |
|
Ese día, el renuevo del Señor será belleza y gloria, y el fruto de la tierra será el orgullo y el adorno de los supervivientes de Israel.
|
| Lectura de mediodía |
Isaías 4:3 |
|
Los que queden de Sion y permanezcan en Jerusalén serán llamados santos y los que queden en Jerusalén, anotados para la supervivencia.
|
| Lectura de la tarde |
Isaías 61:11 |
|
Como la tierra hace crecer las cosas frescas, como un jardín hace brotar las semillas, así el Señor hará brotar la integridad y la alabanza a los ojos de las naciones.
|